La compañía de seguridad informática TrendMicro identificó al menos 29 aplicaciones que fueron retiradas de Play Store por utilizar información indebida de los smartphones, como sustraer imágenes, instalar adware (publicidad no deseada) o crear atajos para seguir obteniendo datos, aún cuando eran desinstaladas de los teléfonos móviles.
Las Apps retiradas se utilizaban, además, para identificar hábitos de navegación y comportamientos de reacción a publicidad para enviar a los usuarios, anuncios de fishing, es decir, suplantación de identidad de marcas reconocidas para atraer clicks y mostrar contenido malicioso o pornografía, así como obtener datos personales. Algunas aplicaciones para corregir fotografías o aplicarles filtros "de belleza", robaban estas imágenes para crear perfiles falsos en redes sociales, que a su vez eran utilizados para generar actividad en otros.
En abril del año pasado la trasnacional Play Store anunció la eliminación de lo que llamó “paraíso de Fake apps”. Estas permitían crear identificaciones falsas, tarjetas, diplomas y otros documentos. Aunque aún no se ha legislado acerca de la ilegalidad de dichas prácticas en internet, debido a que el principal argumento de los desarrolladores es que se trata de “bromas”, Google asegura que “no permitirá aplicaciones que ayuden a confundir a otros usuarios”.
Las recomendaciones, tanto de Play Store, como de TrendMicro, son que antes de descargar aplicaciones se realice una búsqueda acerca de la misma para conocer si existen denuncias en la red, o leer los comentarios de los usuarios que generalmente pueden dar un panorama amplio al respecto.