Entre las acciones que el gobierno federal implementará para fomentar la lectura, durante un evento en Sinaloa, el Director General del Fondo de Cultura Económica, Paco Ignacio Taibo II, declaró que se “forzará” a la industria editorial a bajar sus precios.
Ante la excusa de que en México no se lee por un tema económico, el funcionario dijo que es necesario “fortalecer los valores culturales, morales y esprirituales” en el país y será a través de la lectura que se logre alcanzar dicho objetivo, para lo cual comenzarán con una campaña de promoción de lectura que acompañará la disminución en el costo de las publicaciones e incluso se planea presentar un plan en el Instituto de Vivienda para que las familias, al comprar su casa, cuenten con bibliotecas de al menos cinco ejemplares.
Los índices de lectura de la Organizaicón de las Naciones Unidas para la Cultura y la Educación, UNESCO, posicionan a México en el lugar 107 de 108, y el Gobierno Federal propone no sólo bajar el precio de los libros, sino regalar ejemplares. Entre otras acciones se planea instalar en todo el territorio nacional, 30 librerías del Fondo de Cultura Económica y Educal con libros desde $10 pesos.
Taibo II aceptó que enfrentarán muchos retos para fomentar “el placer por la lectura” y que los lectores se acerquen a la literatura sin miedo, “tenemos que romper el miedo a la cultura, debemos desterrar la idea de que leer es aburrido”, dijo.
En el evento estuvieron presentes el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador y su esposa Beatríz Gutiérrez Müller quien exhortó a las personas a leer “todo lo que puedan, novela, poesía, ensayo, cuento, un periódico, libros de texto, el libro que sea”, comentó, debido a que sólo leyendo se puede adquirir el hábito y el gusto.
Por su parte algunos escritores, intelectuales y miembros de la industria editorial, no ven las iniciativas de reducción de precio con muy buenos ojos, aunque otorgan el beneficio de la duda y están expectantes de conocer las estrategias, debido a que el rubro está ya muy castigado en términos económicos.